CONCLUSIÓN

No me puedo creer que el Prácticum II haya llegado a su fin!! Ha sido un proceso largo, y a veces complejo, sin embargo me siento satisfecha con el resultado y cierro esta etapa con muy buen sabor de boca.

Estos últimos meses me han servido para afianzar mi convencimiento de la difícil labor, aunque gratificante, que tienen los/as psicopedagogos/as sobre todo en el ámbito de la “Educación No Formal”. La poca consolidación del papel profesional del psicopedagogo en este ámbito, hace que tengamos que estar, todavía más que en el ámbito “Formal”, en un continuo proceso de aprendizaje y adaptación, que aunque costoso, es muy gratificante.

Ha sido un proceso en el que he asumido una nueva actitud hacia el aprendizaje y construcción del conocimiento y he adquirido aprendizajes colaborativos y significativos. Todo ha sido posible gracias a la sólida formación teórica, y común a ambos contextos de intervención (“Formal” y “No Formal”) adquirida a lo largo de estos años en la UOC, y a la libertad que desde el centro de prácticas (la asociación) se me ha proporcionado a la hora de tomar decisiones.

Durante el proceso nos hemos encontrado con dificultades que hemos tenido que ir resolviendo, por ejemplo en relación a la actitud que han presentado algunos de los usuarios en el grupo, y modificaciones en relación a la temporalización con el fin de ir adaptándose a los cambios que iban surgiendo.

A pesar de ello, podemos concluir con que este proyecto se ha mostrado eficaz ya que, aunque es muy pronto para ver resultados para los usuarios, si se ha observado una leve mejoría en los procesos léxicos y en los de planificación de la escritura y sobre todo para mi, como alumna, puesto que me he enfrentado a la realidad de la profesión de psicopedagoga.

He tenido la suerte de poder contar con un gran equipo de profesionales de los que he podido aprender y a los que me gustaría agradecer su trabajo desinteresado en mi proyecto y en mis prácticas, porque sin ellos/as el resultado no sería el mismo. Agradecer también a las familias su colaboración, ya que me consta que han hecho un gran esfuerzo para ello, dada la poca implicación que habitualmente tienen en las iniciativas que desde la Asociación se llevan a cabo.

Este proyecto es el principio de un camino que se ha de recorrer a largo plazo, pero ninguno de los que en él hemos participado dudamos, que es absolutamente necesario continuar, sin cesar en el empeño de ayudar a nuestros usuarios en el proceso de mejora de su calidad de vida. 

                                                                 

Finalmente, un guiño a “mis chicos”, ya que ha sido un auténtico placer haber podido vivir esta experiencia con ellos y sobre todo haberlos conocido. Mil gracias!!!